La pregunta resuena en cada conferencia tecnológica y cada sala de juntas: ¿sobrevivirá Adobe a la revolución de la inteligencia artificial generativa? Con cuatro décadas de dominio absoluto en el software creativo, el gigante tecnológico enfrenta su mayor desafío existencial desde su fundación. Sin embargo, la respuesta es más matizada de lo que sugieren los titulares alarmistas.